martes, 27 de octubre de 2009

Random 2

Do whatever you want, 'cause I'll do whatever I want

miércoles, 14 de octubre de 2009

El calor

Creo que ya descubrí por qué me gusta el calor.
Desde hace varios años tengo una aversión por el frío, y una filia muy marcada por el clima cálido, incluso llegué a pensar que soy de sangre fría, sí como los reptiles y qué.
Una de las razones por las que no me gusta el frío es porque de verdad sufro con esa sensación, no encuentro manera de disfrutarla, cuando tiemblo de frío todo mi cuerpo está contraido, en tensión, es imposible relajarme...

En cambio con el calor, todo es diferente. Es cierto que el calor puede ser también incapacitante, pero tengo mejor desarrollada la capacidad para disfrutarlo. Siempre puedo dormir por más calor que haga, con el frío no, y dado que dormir es uno de mis placeres más grandes, entonces este es un punto a favor del calor.

Pero hay otra cosa. Con el calor se siente más. Sí, es muy lógico: con menos ropa, se puede sentir más. La piel queda libre y se puede sentir el sol, el aire, la lluvia y otras pieles, a diferencia del frío, en donde bajo tres centímetros de ropa no se siente ni una aguja (siempre que la aguja mida menos de 3 cm jaja).

Y para otros efectos, creo que también el calor es una circustancia más favorable. Por ejemplo cuando hace frío, uno se quita de ropa para saltar a la cama y taparse. Cuando hace calor uno se quita la ropa y puede pasear por la vida sin mayores preocupaciones.

Cuando se trata del tacto, mi sentido favorito, el calor lleva todas las de ganar
.